El minimalismo es una corriente, técnica y expresión en general que lleva varias décadas implementándose tanto en la arquitectura, en las las artes plásticas, en la moda, en la música y por supuesto en el diseño de muebles. Sus orígenes tienen lugar en la década del 60 bajo representantes como el pintor Ad Reinhardt (1913-1967 Estados Unidos) cuyas obras expresaban un gran contenido a través de una simpleza revolucionaria y el arquitecto Van Der Rohe (1886-1969 Alemania) que a lo largo de su vida profesional se esforzó por conseguir una arquitectura de carácter universal y de leguaje simple, muy conocido entre otras cosas por su célebre frase Menos es más.
El minimalismo ofrece soluciones estéticas y funcionales que transcienden en el tiempo, dotando de modernismo y amplitud a cualquier espacio intervenido. Es un estilo que cuenta con estructuras simples, materiales nobles como la madera y colores neutros. El blanco tiende a ser el protagonista de los últimos tiempos por su capacidad de amplificar y dar luz a los ambientes. El mobiliario minimalista hace foco en aprovechar al máximo el lugar de guardado, sin embargo, no deberían estar adornados excesivamente, se trata de que quede lo más limpio posible a la vista para dar una sensación de orden.
Sobriedad, simplicidad y elegancia son algunas de las cualidades que caracterizan al mobiliario minimalista pero tienen una premisa superior a destacar: nos ofrece la comodidad y funcionalidad que tendríamos con otros estilos pero despojado de elementos sobrantes, ahorrando procesos que encarecerían al producto y perdurando en el tiempo.
Además de sus ventajas a la hora de decorar un espacio, el minimalismo estimula en el usuario sensaciones de tranquilidad debido a su aspecto simple, evitando la acumulación y siendo más factible de combinar con otros objetos ya sean estos minimalistas o no. Por ejemplo, arriba de un vajillero de carácter minimalista puede ir perfectamente un cuadro que responda a otros movimientos artísticos como el expresionismo o surrealismo por nombrar algunos. Y he aquí una de las mayores virtudes, posee una insuperable versatilidad a la hora de integrarlo a los ambientes que ya tienen su propia personalidad sin desentonar en lo más mínimo.
Ir a lo esencial es ser minimalista y estamos convencidos de que este el camino que queremos ayudarlos a transitar a la hora de amoblar sus hogares, negocios u oficinas!